Fernanda Lamelas

Nací en San miguel de Tucumán, un caluroso 27 de Enero, estrenando la democracia de nuestro país en el año 1984. Al año de vida gané mi primera muñeca en un desfile de disfraces del maternal, o guardería como se llamaba en aquel entonces, vestida de una bailarina cachetona y ganándome así los aplausos de los demás padres y maestros. Mi niñez la pasé luciendo los más hermosos disfraces que confeccionaba mi mamá con retazos de tela y hasta papel crepe. A mis 7 años asistí a la Escuela de danza del Teatro San Martin, donde además hacía un taller de plástica y de teatro. En los actos escolares estaba siempre presente: de dama antigua, negrita, bailarina hawaiana, danzas folklóricas, etc. En la primaria tenía materias electivas en la escuela, de las cuales una era Artes Escénicas, y ya en la secundaria era miembro del grupo Vocacional de Teatro de la Escuela Sarmiento, donde realice mis primeras obras de teatro de texto: Una Libra de carne, de Agustín Cuzzani, bajo la dirección de Patricia Garcia y Las Aventuras sexuales de Robinson Crusoe, de Dalmasio Sáenz, y Mac’s Velorios (creación colectiva a partir de textos de Julio Cortázar, Girondo y Mario Bendetti) bajo la dirección de Martín Giner. Egresada de la secundaria debía elegir una carrera “decente” para mi futuro, por eso me dije: “debo ser doctora!” y allí me fui, Facultad de Medicina de la UNT. Tan aburrida, sobria y conservadora como extraña, estaba viviendo una vida alejada de mis pasiones, pero oprimida por las responsabilidades de una vida futura que se aproximaba. ¡Qué duro tener que elegir un destino a los 17 años, y que las artes no quepan dentro de esta posibilidad! Pero por suerte mis amistades teatreras me llenaban el alma y me daban valor para dar el salto, un gran salto. Salir de allí e inscribirme en la Lic. en Teatro, al comienzo a escondidas, y luego comunicarle a mis padres que no iba a ser doctora….quería ser teatrista! Caos y desilusiones al comienzo, seguidos de hermosos años de aplausos y en la primera fila: mis padres, los desilusionados que luego se transformaron en mi primer público siempre presentes, además de vestuaristas y utileros número uno. Desde el 2004 hasta hoy, solo puedo recordar 11 años llenos de experiencias inolvidables. Transcurrir la carrera rodeada de gente maravillosa, compañeros, amigos de la vida, grandes maestros, y muchas puestas en escena, creaciones colectivas y montaje de textos. Mi primer grupo profesional de teatro, Suvastateatro (2007 -2012) me dio la posibilidad de conocer los primeros festivales y vivir la Fiesta Provincial del Teatro desde adentro, de la mano del maestro Cesar Romero. Ser parte de dos obras y dirigir otras dos. Levantar junto a ellos una casa de teatro barrial: casa Lujan Espacio Cultural Alternativo que funciona hasta hoy. En el 2008 viví 6 meses en el exterior, becada, donde también hice teatro: mi primera dirección con actores brasileros con la puesta “Desde à falesia” (desde el acantilado) de Fernanda García Lao, con traducción de mi autoría y un gran elenco que me acompañó. 2009 mis primeras becas en investigación, carrera de la cual me enamoré y que hoy me permiten aspirar a mi doctorado. Y desde ese año decidí dedicarme a lo que hoy me trae muchas satisfacciones, mi grupo de Teatro de Títeres y Objetos “Cosito Comue’ Arte Titiritero”, con varias obras estrenadas, me conecto con grupos maravillosos de toda América, que nos llevó hasta Guatemala y me abrió la puerta al maravilloso mundo del teatro de muñecos. Este año a semanas de lanzar el 5° Festival Internacional de Teatro de Títeres y Objetos “FIESTA TITIRITERA HOMENAJE A ROBERTO ESPINA” solo puedo pensar en todas victorias que tuvieron las mujeres de mi país y del mundo, y como hoy, nosotras podemos disfrutar de estos beneficios y explotar nuestro lugar de hacedoras de arte, para seguir creciendo en derechos, y aportando nuestro granito de arena a este mar de cultura del cual formamos parte.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Luciana Guiot

Yesika Migliori

Sonia Saracho