Soledad Valenzuela

Tuve contacto con el teatro desde muy pequeña, mi papá era sonidista del Teatro Estable de la Provincia de Tucumán y me llevaba con él a las funciones de obras que quedaron grabadas a fuego en mi memoria: “El hombre de la Mancha”, “Mi bella Dama”, “Cyrano de Bergerac”… Cuando tenía 9 años y atravesaba por una etapa de timidez muy pronunciada, a mis padres les pareció que podía empezar un taller de teatro y que tal vez esto me ayudaría a superarla. No se equivocaron. Inicié mis estudios en el Taller Infantil del mítico Nuestro Teatro a cargo de Rosita Avila, maestra entrañable y gran amiga de mi padre. Ese lugar fue mi segunda casa hasta su cierre a fines de los años ’80. A los 12 años, mientras todavía cursaba el taller, Rosita me ofrece formar parte del Elenco Juvenil de Nuestro Teatro y me convertí en la integrante más joven. Con ellos estrené “Clavelina, la vaquita de la Luna” de Madeleine Barbulée y “El tesoro de Margarita” de Oscar Quiroga. Fueron años de pura magia y de mucho aprendizaje pero también de renunciamiento, me perdía cumpleaños, fiestas y salidas con amigos porque tenía que “trabajar”. A los 14 años y después de haber recorrido casi toda la provincia y varios festivales nacionales decidí que era el momento de disfrutar de mi adolescencia y terminé mi relación con el teatro en buenos términos. Cuando egresé del secundario en 1989, comencé a estudiar Psicología, carrera que ya tenía en mente desde hacía varios años. Mientras cursaba el segundo año, en 1990, un director me pide hacer un reemplazo en una obra, conociendo mi pasado como actriz, porque el estreno era inminente y una de las intérpretes había abandonado el proyecto. Dije que sí sin estar muy convencida pero fue tal mi entrega en los ensayos que pasé de tener muy pocas réplicas a que el director me agregara escenas. Para cuando estrenamos “Nuestro Pueblo”, el teatro había vuelto definitivamente a mi vida. En 1991 comencé la carrera de Licenciatura en Teatro en la Facultad de Artes de la Universidad Nacional de Tucumán y egresé en el año 1996 con el título de Intérprete Dramático. A partir de entonces he integrado como actriz, diversos elencos independientes y el Teatro Estable de la Provincia de Tucumán en numerosas ocasiones. Interviniendo en más de 20 puestas entre las que se destacan: “Nuestro pueblo” de Thorton Wilder, “Locos de verano” de G. De Laferrere, “Amadeus” de Peter Shaffer, “La opera del malandra” de Chico Buarque De Hollanda, “Trampa de amor” de Edoardo De Filippo, “El sueño inmóvil” de Carlos Alsina , “Ivonne, Princesa de Borgoña” de Witold Gombrowicz, “El loco de Asís” de Manuel Gonzalez Gil, “Sábado, domingo y lunes” de Edoardo De Filippo, “Medida por medida” de W. Shakespeare, “La venganza de Don Mendo” de Muñoz Seca, “Doña Rosita la soltera” de F. García Lorca, “¿Estás ahí?” de Javier Daulte, “Por el placer de volver a verla” de M. Tremblay, “Romeo y Julieta” de W. Shakespeare, “Cancún” de J. Galcerán entre otras. Me he desempeñado como asistente de dirección de reconocidos directores como Héctor Giovine (“Borges un rostro en el espejo”), Mario Rolla (“Los retratos”), Pablo Parolo (“Príncipe azul”, “No quiero que me quieras?” “Criminal”) y Oli Alonso (“Exit”). Tuve a mi cargo la dirección de actores del musical “Sueño de hadas, duendes y delfos” de Carina Fraczack, la codirección de “Bienvenido León de Francia” del grupo La Pochoclera y la coordinación general del espectáculo “Noche de estrellas” del grupo Gloss, así como de numerosas muestras de talleres y colegios secundarios. He tenido la dicha de participar como actriz en diferentes festivales y encuentros de teatro aún de nivel internacional como el Festival de Teatro de La Habana – Cuba en 1997 y el Festival Internacional de Buenos Aires 1999. En televisión debuté como actriz protagónica en la miniserie “Ilustres desconocidas”. Y fui actriz y productora ejecutiva de la miniserie “Cinco escenarios, un crimen” dirigida por Marcelo Katz. También en cine participé en el film “El piano mudo” dirigida por Zuhair Jury y protagonicé el cortometraje “Santa” de Carlos Vilaró Nadal, ganador del Festival Nacional Cortala 2014. He sido honrada con diferentes reconocimientos y distinciones como el premio Iris Marga Actriz revelación en 1997, el Premio Nacional Leonidas Barletta 97/98 como mejor espectáculo teatral del interior, ambos por “El sueño inmóvil” y la nominación al Premio Artea 2005 y 2009 como actriz protagónica, en “La venganza de Don Mendo”.y en “¿Estás ahí?” respectivamente. Obtuve el Premio a Mejor Actriz Protagónica en la Fiesta Provincial del Teatro 2011 por mi labor en “Por el placer de volver a verla” y el Premio ARTEA (Asociación Argentina de Actores) 2013 como Mejor Actriz Protagónica por “Cancún”. Desde hace 20 años integro el grupo teatral “Compañía Filodramática de Socorros Mutuos” como actriz, asistente de dirección, producción y gestión. Hace 15 años dicto talleres de teatro para niños, adolescentes y adultos en la provincia de Tucumán y me desempeño como docente en el nivel secundario y en numerosos proyectos sociales. Actualmente escribo mi tesis para terminar la Licenciatura en Gestión y Producción Teatral de la Facultad de Artes y Diseño de la Universidad Nacional de Cuyo. Ahora, a la distancia, y con 43 años, creo que aquel intento de mis padres para que superara la timidez, marcó mi vocación. Pienso en aquellas noches viendo teatro en la cabina de sonido junto a mi papá, repitiendo de memoria los textos de todos los actores y creo que hubiera estado feliz y orgulloso de este camino que recorrí y que no pudo ver. Me siento muy afortunada de hacer lo que amo, de disfrutar cada día lo que esta profesión me enseña, de seguir teniendo sueños, proyectos y también de todos los obstáculos que tengo que superar para seguir adelante...porque en definitiva de eso se trata la vida.